Este año habrá Bota de Oro. El trofeo se suspendió con el parón por el coronavirus, y aunque la Ligue 1 se haya finalizado sin jugar, la 'ESM', conglomerado de medios que lo entrega, ha decidido que siga adelante.
Así, los máximos artilleros de Europa tendrán la oportunidad de luchar por este prestigioso galardón. Immobile se fue al parón en primera posición, pero Lewandowski no ha desaprovechado la temprana reanudación de la Bundesliga. Ya lleva 30 goles, o 60 puntos.
Pero no estaban solos en cabeza. Haaland les acechaba en tercera posición, y Cristiano, Werner y Messi seguían el rastro a la cabeza de la tabla.
La ventaja de Immobile y Lewandowski era tal que, tras cuatro jornadas, Werner y Haaland no han sido capaces de dar caza al italiano. Tienen 50 y 44 puntos, respectivamente.
Eso sí, la decisión disgustará a Mbappé o Ben Yedder, los máximos anotadores de la Ligue 1 (octavo y noveno en el momento de la suspensión), quienes se han quedado sin opciones por la finalización anticipada de su competición.
Dice 'Marca', representante de la 'ESM' en España, que los miembros de esta han decidido seguir adelante con el trofeo, pese a la finalización de algunas ligas, como la francesa, la neerlandesa o la escocesa.
"En otras temporadas diversos países y jugadores tuvieron la mala suerte de contar con 18 clubes en comparación con otras Ligas que tenían 20 equipos. Por tanto, esta temporada habrá un ganador", se justificó el conglomerado.
Tampoco se tendrá en cuenta los 'play off' de algunas ligas, como la danesa, por lo que estas que se juegan en dos fases también han finalizado su aportación a la Bota de Oro.
Puede parecer injusto, o un agravio, pero hay que tener clara una cosa: por el sistema de multiplicadores es muy complicado que la gane alguien de fuera de las grandes ligas. La última vez que ocurrió lo hizo Mário Jardel, del Oporto, en la 2001-02.