El Inter le dio la vuelta al derbi de Milán a lomos de un Romelu Lukaku que ha vuelto por sus fueros. Del delantero del Manchester United al que brilla en la Serie A hay un mundo... y muchos kilos de peso de diferencia.
Después de dos años en Old Trafford, Antonio Conte confió en un futbolista que estaba sumido en su crisis más profunda. No triunfó como se esperaba y su forma era cuando menos dudosa. Incluso Gary Neville, ex del United y comentarista en 'Sky Sports', atizaba al belga.
"¡Ha admitido que tenía! ¡Pesa más de 100 kilos y es jugador del United! Su falta de profesionalidad es contagiosa", sentenció entonces el inglés. Pues bien, aunque su exceso de peso era evidente, este no se debía a esa escasez de valores.
Según 'The Telegraph', el belga sufrió problemas digestivos que el hicieron coger más peso del que debiera. Sin embargo, a su llegada a Italia, el cuerpo médico del Inter pudo detectárselos y ponerles una solución, algo que no había sido capaz de hacer el United.
Tras ponerse a tono físico y recibir la motivación de Conte (Lukaku decía que le ridiculizó delante de todos para sacar su rabia), el delantero ya suma 21 goles en 30 partidos con el Inter. El mejor Lukaku está de vuelta.