'Zizou' quedó en los libros de historia del fútbol francés por su enorme visión de juego, lucha, entrega y compromiso en su etapa como jugador. Hay pocos como él, pero hubo uno que estaba destinado a recoger su testigo.
El protagonista es Gourcuff. El centrocampista de Ploemeur ha ido de más a menos durante su actual carrera. Le apodaron el 'Petit Zizou', aunque acabó quedándose en el camino.
Y eso que desde muy joven ya estaba destacando en las categorías del Lorient. De ahí pasó a los juveniles del Rennes para acabar firmando su primer contrato como profesional en el año 2003.
Poco a poco, Gourcuff se fue haciendo un hombre y equipos como Ajax, Milan o Arsenal, entre otros, se fijaron en él. Al final, el conjunto 'rossonero' se lo llevó en verano del año 2006.
Encima, el centrocampista llegó y besó el santo, ya que ganó la Champions con los italianos junto con la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes. No obstante, el Milan decidió cederlo al Girondins de Burdeos para luego vendérselo por 15 'kilos'.
En el cuadro francés, donde estuvo del 2008 al 2010, se convirtió en uno de los mejores del equipo. De hecho, fue campeón de la Ligue 1 y elegido mejor jugador. El Lyon se fijó en él y lo compró por 22 millones de euros.
Cuesta abajo y sin frenos
En el Olympique, el centrocampista tomó el protagonismo durante varios momentos, pero luego no ofreció lo que la entidad y la afición esperaba de él. Eso se tradujo en una salida al Rennes tras desvincularse del Lyon.
Tres años duró en los 'rojinegros' y ahora, Gourcuff busca recuperar sensaciones a sus 32 años en el Dijon, un equipo con el que ha firmado por una campaña.
Bienvenue Yoann!
— Dijon FCO (@DFCO_Officiel) 20 de julio de 2018
Le communiqué à lire : https://t.co/ia2xG2sIOW pic.twitter.com/owULYiJZDx