La fortuna de Dybala empaña el chispazo de Dzeko sobre la bocina

La jornada 9 de la Serie A se cerró por todo lo alto. Inter de Milán y Juventus se vieron las caras en el Giuseppe Meazza en lo que fue el duelo por excelencia de este domingo. Los pupilos de Simone Inzaghi vieron como les empataron a falta de un minuto para el final del choque.
Y es que el comienzo fue un auténtico disfrute para los aficionados. Un vaivén de ocasiones para ambos conjuntos y un ritmo endiablado de juego fueron la tónica en los primeros compases del choque. Sin embargo, poco a poco, el cuadro local comenzó a desplegar su potencial ofensivo.
Antes de llegar a los 20 minutos de juego, el Inter asestó el primer y único golpe a su rival. Un misil de Çalhanoglu, que golpeó en el larguero, fue suficiente para que Dzeko recogiese el rechace y a puerta vacía pusiera el 1-0 en el luminoso. El tanto tuvo que ser revisado por el VAR por la posición dudosa del bosnio, aunque finalmente el colegiado decretó su validez.
Tras esto, el cuadro de Inzaghi dio un paso atrás y, aunque siguió dominando la posesión, rebajaron su ritmo en ataque. Esto fue aprovechado `por la Juve, que con más ganas que acierto, se lanzó a por el empate.
La 'Vechia Signora' creó mayor peligro sobre todo a balón parado, aunque los disparos desde larga distancia también fueron una de sus armas para lograr la igualada. El que no estuvo nada acertado de cara al gol fue Morata, que se vio fallón y desesperado en ataque.
El comienzo de la segunda parte no fue del todo como se esperaba, ya que ambos equipos manifestaron nerviosismo y eso les propició cometer varias imprecisiones en el juego. Dzeko siguió con su particular batalla contra Chiellini, en una auténtica clase de defensa-ataque de ambos jugadores.
La recta final del partido evidenció la superioridad de los pupilos de Allegri. El Inter acabó de dar ese pasito atrás y el conjunto visitante fue el único que apostó por seguir jugando al fútbol.
El reloj jugó en contra de la Juventus y el conjunto 'neroazzurro' jugó sus cartas. Aunque no demostró ser inteligente, ya que jugó con fuego hasta que al final se acabó quemando.
El partido ya estaba agonizando y los anfitriones ya se saborearon la victoria. Pero fue entonces cuando entró en escena el colegiado, que señaló la pena máxima favorable a la 'Vechia Signora'. Y efectivamente, tras revisarlo en el VAR, no quedaron dudas de que Dumfries golpeó a Alex Sandro sobre la misma línea del área.
El brasileño fue más rápido que el neerlandés, y además más listo, ya que en cuanto notó el contacto, se dejó caer. Toda la responsabilidad estuvo en las botas de Dybala, que apenas acababa de volver de una lesión.
El '10' no perdonó y en el 89' de partido, igualó la contienda. Un empate que fue justo y merecido, puesto que el conjunto 'bianconero' asedió a su rival desde el momento en el que recibió el gol.
La otra cara de la moneda fue el Inter, que vio como se le escaparon dos puntos en un partido que controló desde el principio. Su racanería y conservadurismo le hicieron sumar un solo punto en casa.