El brasileño recibió un balón a varios metros de la esquina derecha del área rival. Rápidamente, dos jugadores del Saint-Etiennè se colocaron frente a él, intentando taparle cualquier hueco para que continuara la jugada de peligro.
Neymar, recordando a aquel chaval de 18 años que abusaba de cualquier defensor en Brasil, se paró. Movió su cuerpo hacia ambos lados y, cuando ninguno de los dos contricantes se lo esperaba, le lanzó un caño a Hamouma.
El jugador se quedó totalmente confuso... y a Neymar aún le quedaba cuerda. Tras deshacerse de sus dos rivales con una pasmosa facilidad, lanzó un centro exquisito sin mirar buscando a Cavani. El balón iba justo hacia la cabeza del uruguayo, pero este no pudo rematar porque un rival le bloqueó, lo que provocó que acabara cayendo al suelo. El árbitro no señaló penalti.
Neymar #PSGASSE pic.twitter.com/xBgLj3xilL
— So (@Rebeudu78) 25 de agosto de 2017