Uno de los lances del partido entre el Athletic y el Villarreal tuvo como protagonistas a Santi Cazorla y Capa. El jugador 'león' le propinó al amarillo una dura entrada, pero el colegiado lo dejó en cartulina amarilla. Hubo protestas en busca de que le sacara la roja.
Más tarde, el centrocampista mostró en sus redes sociales cómo había quedado su pierna después de la patada. Se puede notar una herida no profunda, pero sí bastante fea, que dibuja una curva desde algo por debajo de su rodilla hasta mediados de la espinilla.
De hecho, la polémica del arbitraje ha provocado que el 'submarino amarillo' vaya a presentar una queja por escrito a la RFEF por la actuación del colegiado. La entidad considera que este es reincidente, así que espera que haya alguna respuesta que les satisfaga.
Pero la cosa no quedó en la dura entrada a Cazorla. También hubo un dudoso penalti por mano de Pau Torres, que tenía el brazo pegado a la espalda y, a pesar de que el VAR revisó la jugada, fue penalti. En definitivia, fue un duelo de lo más llamativo.