Puede que, después de casi pelearse a golpes con Tiago Djaló en el partido del PSG contra el Lille, Neymar no sea sancionado. 'RMC Sport' relata que la Ligue 1 no considera su acción una agresión y que, además, al haber enfilado el túnel de vestuarios por doble amarilla, decrecen las posibilidades de que haya un castigo severo.
Los momentos de mayor tensión se produjeron cuando el brasileño y el portugués ya habían salido del terreno de juego. El primero se acercó al segundo, continuó recriminándole su proceder como venía haciendo en el verde y le empujó. Tras separarles varias personas que estaban cerca, volvió a por él sin éxito.
Tanto empujón no se considera en la organización del campeonato doméstico francés como agresión, tal y como explica la fuente referida en el primer párrafo. Además, en caso de haberlo sido, el colegiado le habría mostrado la cartulina roja directamente, o, al menos, es lo que el estamento entiende.
'RMC Sport' recoge, eso sí, que la máxima sanción a Neymar podría ascender a tres encuentros sin saltar al campo aunque no se considerara agresión lo que hizo. El motivo, que la Ligue 1 sí que concibe esta pena para casos en que un jugador empuja a otro sin el balón en movimiento.
El vestuario se harta de Neymar
'L'Équipe' indica, en el contexto de esta polémica, que el vestuario del PSG está algo hastiado con las idas y venidas de Neymar. Se tiene cierta sensación en la plantilla de que el brasileño goza de más privilegios que el resto o que incluso forzó su expulsión para no jugar contra el Strasbourg.