Alonso, que formaba parte del dispositivo de seguridad establecido junto al estadio de San Mamés, falleció como consecuencia de un paro cardíaco.
"Es muy triste que en un espectáculo tan bonito como el fútbol ocurran estas situaciones. Además, hoy en día tenemos las redes sociales, en las que se anunció la quedada para pegarse, por lo que era completamente evitable", insistió el preparador.
El técnico asturiano añadió: "Solo nos ponemos tristes cuando ocurre algo así" e instó a que "los organismos competentes tomen medidas para que no vuelva a ocurrir".