El Reino Unido permitirá que 10.000 aficionados puedan asistir a los estadios de fútbol a partir del 17 de mayo, según anunció este lunes el primer ministro, Boris Johnson.
La medida llegaría a tiempo para la última jornada de la Premier League, mientras que se quedarían fuera tanto las semifinales de la FA Cup como la final, que tradicionalmente se disputan en Wembley y que, de no mover sus fechas, se jugarían a puerta cerrada y sin público.
El fin de semana del 22 y el 23 de mayo se disputa la última jornada de la Liga Inglesa, justo cuando estos 10.000 aficionados podrían agolparse ya en las gradas de los templos británicos.
Según la hoja de ruta marcada por Johnson, que pone como objetivo para el levantamiento de todas las restricciones en el 21 de junio, los estadios con gran capacidad como Wembley podrían albergar dicha cantidad debido a su magnitud.
Pero no solo se trata de una gran noticia para la Premier. Y es que esto sería un buen empujón de cara a la Eurocopa de junio, que planea disputar siete encuentros en la capital inglesa, tres de la fase de grupos, uno de cuartos de final, las dos semifinales y la final.