¿Por qué pudo aguantar 40 minutos con el cruzado roto en un partido de máxima exigencia? Todo tiene que ver con su estado físico. El azulgrana se encontraba en el mejor momento de su carrera tanto en el juego como mentalmente.
Rafinha entró en el campo del Wanda Metropolitano tras el descanso del mismo, sustituyendo a Sergi Roberto, también lesionado. Doce minutos más tarde notó una molestia al correr.
No le dio más importancia el futbolista del Barcelona, que tras ser atendido volvió al campo para terminar jugando el resto del choque. No notó nada más... hasta la mañana posterior al partido.
No es la primera vez que Rafinha tiene una grave lesión en la rodilla. De hecho, es la tercera vez en apenas tres años. La primera fue en septiembre de 2015, con una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, la contraria a la de este sábado. La segunda lesión, en el menisco interno también de la rodilla derecha.
Es por ello que en Milán, cuando se encontraba en el Inter, inició un programa de recuperación que ha seguido en Barcelona, informó 'Sport'. Ello le propició tener un gran estado de forma que le permitió seguir contra el Atlético.
Tras las pruebas se confirmó que Rafinha se perderá lo que resta de campaña. Pese a ello, el Barcelona ha decidido no acudir al mercado para reemplazar al jugador hispanobrasileño.