El encuentro con más morbo de la jornada de la Premier League acabó con un reparto de puntos gracias al gol de Zlatan Ibrahimovic, que sirvió para igualar la contienda y dar paso al frenesí en los últimos minutos.
Pero en los banquillo también se jugó un partido. El de Mourinho contra Klopp. El portugués recriminó una decisión del colegiado después de que Firmino empujara a Ander Herrara. Ambos vieron la tarjeta amarilla y Mourinho estalló.
El luso no pensó en la reacción de un Klopp que estuvo a punto de 'comérselo'. Si Mourinho gritó, el alemán lo hizo más fuerte.
Mourinho y Klopp se calentaron en los banquillos. pic.twitter.com/A67HW7q9hb
— El Número Diez (@elnumerodiezco) 15 de enero de 2017