Más allá de diseccionar el desastre de Anfield, otro de los grandes focos que había en la sala de prensa, aunque tardo en aparecer, era la opinión de dos de los pesos pesados del Barça sobre el posible fichaje del delantero francés.
Aunque estaban presentes tanto Piqué como Messi, la cuestión fue dirigida expresamente para el argentino. "No opino", se limitó a decir el rosarino.
Algo que puede ser interpretado como una interferencia a lo importante de su alocución, tanto la final contra el Valencia como el análisis de Anfield, pero también como un termómetro de lo que le importa a Leo Messi su llegada al Camp Nou.
Y es que resulta puro contraste con lo ocurrido el año pasado. Justo cuando más candente estaba la llegada del Griezmann al Camp Nou, Messi concedió una entrevista en la que hablaba maravillas del galo.
"No sé si es prioritario. Sí que estoy de acuerdo que para volver a ganar la Champions League tenemos que tener a los mejores jugadores. Y Griezmann es uno de ellos", llegó a decir entonces.