53 goles y cientos de batallas después, Wayne Rooney dirá adiós en Wembley a la Selección Inglesa. Lo hará en un amistoso frente a Estados Unidos que tiene al histórico delantero como único protagonista. Un ídolo, un referente de los 'Tres Leones' que pone punto y final.
15 de noviembre de 2018
La catedral del fútbol inglés, la que siempre huele a fútbol, se engalanará para que Rooney se despida con honores. En Inglaterra saben perfectamente cómo honrar a una leyenda y esta ocasión no será diferente. Rooney, en la previa, admitió que el final de su carrera está en Estados Unidos.
Volverán los nervios por última vez, escuchará desde el verde un himno que lleva grabado en la piel. Jugará y, cuando pise el césped, portará el brazalete de capitán tal y como confirmó Southgate. En el país británico, por supuesto, confían en contemplar un último gol de Rooney.
Lejos queda ya su debut, allá por 2003. El joven Rooney, ese 'asesino' del área con cara de no haber roto jamás un plato, comenzó una carrera histórica con su país que no pudo culminar con un título. El gran debe, sin duda. Pese a todo, pocos defendieron con tanto honor esa camiseta. Bienvenido, Rooney. Y hasta siempre.
15 de noviembre de 2018