Según confirmó LaLiga este viernes, la invasión de campo posterior al Espanyol-Barcelona está ya en manos de la justicia. La denuncia judicial se dirige frente a aquellas personas ya identificadas por parte de LaLiga, en colaboración con el RCD Espanyol, así como frente a todas las que hayan tenido participación en los incidentes y resulten identificadas por las autoridades policiales.
En la denuncia se solicita al juzgado que libre mandamiento a la L'Oficina de l'Esport dels Mossos d'Esquadra para que analicen las imágenes y se proceda a su identificación.
Hace 2 días, LaLiga ya remitió al Comité de Competición y a Antiviolencia su denuncia por los hechos, sucedidos al término del partido con la victoria del Barcelona por 2-4, mientras el equipo azulgrana festejaba sobre el césped la consecución del título liguero.
En la misma reflejaba que se produjo una invasión por parte de más de un centenar de aficionados locales, por lo que tuvo que intervenir tanto el personal de seguridad privada del club, como los antidisturbios, y se produjeron ciertos daños materiales relevantes asociados al equipamiento técnico de la producción del partido.
LaLiga recordó que, según la información facilitada por el club local, para este encuentro el propio club había incrementado el habitual dispositivo de seguridad privada, pasando de 107 a 167 vigilantes de seguridad, y de 390 a 460 auxiliares de seguridad".
El documento indicó también que la gran mayoría de los aficionados locales que invadieron el terreno de juego provenían de la grada inferior de Gol Cornellà.