Lamine Yamal vs Dembélé, un pulso de oro

"Yo le daría el Balón de Oro a..." es la fórmula más repetida en una semana donde relucen dos nombres, los de Lamine Yamal y Ousmane Dembélé. Se han pronunciado jugadores, entrenadores, periodistas y muchas voces autorizadas del mundo del fútbol. Y casi todos coinciden en estos dos nombres pese a las candidaturas muy serias de Raphinha o Pedri. Y no perdamos de ojo a Kylian Mbappé, porque aún falta el Mundial de Clubes.

Puede que sea uno de los años más divididos en este sentido, pero no habrá ganador hasta el 22 de septiembre. Todavía quedan un pico de primavera y todo el verano para decidirlo, pero cada vez que se cruzan alguno de sus candidatos es una gran oportunidad de sumar puntos. Este miércoles, en el España-Francia por la semifinal de la UEFA Nations League, los extremos de Barcelona y Paris Saint-Germain pueden dar un pasito adelante.

Señalábamos a Raphinha porque numéricamente es el futbolista que más goles ha generado de Europa en toda la temporada oficial. 56, nada menos. Pero los focos se han ido poniendo cada vez más en Lamine, cuyo tramo final ha sido fulgurante, echándose al Barça a la espalda en momentos críticos, sumando goles y jugadas clave para mantener al equipo de Flick vivo en sus objetivos. Es tremendo lo que ha hecho con tan solo 17 años.

La Champions y un 2025 brutal ayudan a Dembélé

Mientras, Dembélé empezó a lo callado hasta entrar en 2025, cuando explotó como hombre libre en el esquema de un PSG que fue de menos a más, y más, y más. Durante meses fue el máximo goleador de este año natural entre los jugadores de las grandes ligas, siendo solo superado por Kylian Mbappé en el tramo final que le llevó a la Bota de Oro. 29 lleva el madridista recién arrancado junio, por 26 de su compañero de ataque. La Champions League, con dos asistencias en la mágica final ante el Inter, ha sido la guinda.

Los títulos, tras ganar un triplete, y los grandes números, acompañan al 'Mosquito' en su elegibilidad para ganar el Balón de Oro. En total ha hecho 33 goles y ha dado 14 asistencias en 49 partidos con el PSG, más otros dos tantos con Francia. La Liga de Naciones puede ser otro grandísimo impulso para el de Vernon, que en total puede presumir de haber generado 49 dianas a lo largo de esta campaña. Irreconocible para muchos barcelonistas, Luis Enrique ha hecho maravillas con él. Pero queda un consuelo: si no se hubiera ido, Lamine Yamal no habría tenido las mismas oportunidades.

Y ahí es donde entran los méritos del chaval del barrio de Rocafonda. El verano pasado dejó su carta de presentación ante el mundo con aquel golazo ante Francia en la Euro, muestra de su personalidad arrolladora. Y esta campaña se ha asentado generando tangibles ante la portería con 18 dianas y 21 asistencias. De sus botas han salido 39 tantos para el Barça, 41 si sumamos un gol y una entrega más con la Selección Española. En el bolsillo, la Liga, la Copa del Rey y la Supercopa de España.

¿Qué dicen los datos?

Rascamos un poco más allá de la superficie en busca de la estadística avanzada de BeSoccer Pro, donde también sobresalen. Aquí, Dembélé saca la cabeza como era de esperar en el área, donde ha sido más letal que nunca. Tiró mejor (37.21% de efectividad sobre el 20.45% de Lamine) y bastante más (2.22 disparos a puerta por 90 minutos ante 1.61). De hecho, el galo es el futbolista que más remates entre los tres palos ha promediado de las cinco grandes ligas, por delante de Kylian Mbappé.

Una de las claves para esa explosión del francés fue terminar la temporada como falso '9', abandonando su constante por los costados para ocupar los carriles centrales y generar los espacios para Doué, Kvaratskhelia o Barcola. De ahí también que tocara más la pelota en la zona (6.71 sobre 5.15). Aunque con el esférico en los pies, pocos pueden ganar a un Lamine Yamal que fue el segundo jugador de las grandes ligas con más regates exitosos por 90 minutos. Solo le superó el encarador Jérémy Doku, dejando atrás a Bryan Zaragoza, Bynoe-Gittens o Vinicius. Y también a Dembélé, que registró 4.05 por 90 minutos entre todas las competiciones. El barcelonista, 6.37.

El regate y el trabajo de uno, el gol y el pase de otro

Además, también tuvo algo más de precisión, aunque casi empatan con un 56.11% y un 55.09% de acierto en el regate. Eso sí, el español arriesgó y perdió más balones, promediando 13.66 veces por cada tiempo reglamentario mientras Dembélé fue desposeído de la pelota en 12.76 ocasiones. Y aunque asistió y preasistió más, ojo con un Ousmane que dio más pases (37.29 el galo, 32.51 el español), con más finura (79.3% ante 77.07%) y más profundos. 4.26 de media del total iban al último tercio y 3 al área. Lamine estuvo algo por debajo con 2.15 y 2.98 (algo imperceptible) respectivamente.

En defensa, la presión feroz del Barça de Flick ayudó a un Lamine Yamal bastante aplicado. En este sentido superó en prácticamente todos los parámetros a Dembélé, ganando más duelos ofensivos (8.67 a 5.01) y defensivos (2.32 a 1.08), promediando más recuperaciones rápidas tras pérdida (1.72 a 1.24) y conquistando más balones tanto en campo rival (2.12 a 1.45) como en último tercio (0.62 a 0.44).

Al final, el equilibrio es notable a nivel numérico tanto en lo básico como en lo avanzado. Las sensaciones, la Champions -o no- y lo que está por disputar acabarán marcando la diferencia. Y recordemos, sin desmerecer a un grupo de aspirantes más amplio de lo esperado. Quedan esta Liga de Naciones y el Mundial de Clubes para que se cierren todas las candidaturas. Veremos si lo que ocurra este miércoles en Stuttgart no acaba siendo decisivo para un lunes de septiembre en el Teatro de Châtelet de París.