Laporta se querellará contra un periodista por injurias: "Sus constantes visitas a los lavabos..."

Joan Laporta, presidente del Barcelona, va a querellarse contra un periodista de nombre Salvador Sostres por escribir, en su blog personal, un artículo en el que acusa al máximo mandatario azulgrana de ciertas costumbres lesivas para su salud, entre otros asuntos. "De sus constantes visitas a los lavabos se dio cuenta todo el mundo, y de los ruidos que hacía y de cómo compensaba poniéndose colirio", la frase clave de su texto.
Al no haber mencionado directamente a qué se refería, el ex columnista del diario 'ABC' puede haber solventado parte de los problemas que se le echarán encima en caso de que el dirigente siga adelante con su denuncia. Es el diario 'Sport' el que sacó a la luz las intenciones del jefe 'culé', en cuyo entorno ha sentado fatal el escrito. Sus letrados ya están trabajando en las opciones de este frente.
La sensación entre la gente de confianza del líder del club de la Ciudad Condal es de que se han pasado todos los límites permisibles, pues se ha dañado la honorabilidad de su persona. "De hecho, es tan buena persona que no sabe gestionar sin angustia los enormes disparates que está haciendo en esta su segunda etapa de presidente, y si no le pone remedio, solo le esperan o bien una muerte súbita, por un ataque de heridura o por un infarto; o poco más a largo plazo, un horizonte penal francamente complicado", más palabras indignantes para él.
"Lo siento, Jan, que hayas caído en este pozo y que vivas rodeado de cobardes incapaces de llevarte la contraria y de ayudarte. Me sabe mal que estés encerrado de personas tan mezquinas, que quizá crees que son tus amigos, pero que se aprovechan de tu posición en lugar de obligarte al esfuerzo de volver a tomar las bridas de tu vida . Era humillante como hablaban de ti el jueves, algunos de sus acompañantes, mientras ibas y volvías del baño a hacer ruidos y a ponerte gotas en los ojos para compensar lo que tú ya sabes que compensabas", continúa justo después el artículo.
Este es el artículo completo por el que Joan Laporta va a presentar una querella contra Salvador Sostres:
"El jueves en el palco del Bernabéu vi a Joan Laporta destruido. Me dio lástima. Hace tiempo que me ha decepcionado de todas formas que un hombre puede decepcionar a otro hombre, y es verdad que en los últimos tiempos he escrito opiniones e informaciones duras -duras entre otras cosas porque son ciertas- sobre su segunda presidencia . Pero éste no es un artículo sobre sus graves mandamientos morales, por decirlo de la forma más delicada, sino un artículo desolado para verlo tan desbocado y herido, con esa ansiedad tan trágica que la está consumiendo y que si no se detiene lo matará. Cuando has amado a alguien no dejas nunca del todo de amarle, aunque te engañe, aunque te maltrate, aunque haga todo lo posible para pisar su amistad. Supongo que por eso cuando lo vi el jueves no tuve otro sentimiento que el de la pena verlo tan llevado por sus demonios. Estaba gordo, muy gordo, pero sobre todo hinchado, hinchado como se hinchan los hombres que encadenan un exceso con el otro y que cuando se quedan sin fuerzas deben recreárselas.
De sus constantes visitas a los lavabos se dio cuenta todo el mundo, y de los ruidos que hacía y de cómo compensaba poniéndose colirio. Joan Laporta es una buena persona con demasiadas urgencias y demasiado cínicas. De hecho, es tan buena persona que no sabe gestionar sin angustia los enormes disparates que está haciendo en esta su segunda etapa de presidente, y si no le pone remedio, solo le esperan o bien una muerte súbita, por un ataque de heridura o por un infarto; o poco más a largo plazo, un horizonte penal francamente complicado.
Lo siento, Jan, que hayas caído en este pozo y que vivas rodeado de cobardes incapaces de llevarte la contraria y de ayudarte. Me sabe mal que estés encerrado de personas tan mezquinas, que quizá crees que son tus amigos, pero que se aprovechan de tu posición en lugar de obligarte al esfuerzo de volver a tomar las bridas de tu vida . Era humillante como hablaban de ti el jueves, algunos de sus acompañantes, mientras ibas y volvías del baño a hacer ruidos y a ponerte gotas en los ojos para compensar lo que tú ya sabes que compensabas. Si les hubieras oído cómo yo los oí, entenderías en qué agujero estás y con qué gentuza. Tú solías ser un hombre atractivo, agradable, siempre un punto excesivo, como las personas alegres y que aman, pero también siempre dentro de un control no solo físico sino también ético e incluso espiritual. Todo esto ya no está, Jan. Tu deplorable estado físico no es otra cosa que el espejo de tu desprendimiento interior, como un gran alud que ha sepultado la luz y la esperanza que había contigo y todo lo ha vuelto tiniebla.
Los ruidos que hacías en el baño mientras te ponías las gotas, o cuando te encerrabas en el compartimento, eran un espanto, y cuando salías todo el mundo se ponía a comentarlos. Algunos madrileños que siempre te habían admirado quedaban helados viendo cómo te has degradado. No lo decían escarniéndote, sino porque se quedaban materialmente helados cuando te veían pasar. Aún estás a tiempo, querido amigo, si es que en nombre de lo que fuimos me permites que te vuelva a decir así. Estás a tiempo de dejar los excesos, de desintoxicarte, de llevar una vida más aseada. Tienes que hacerlo por ti, por tus hijos, y por las personas que de verdad te quieren, que desde luego no son las que te ríen las gracias por no perder el favor del presidente.
En cuanto al Barça, no pienses que los fichajes realizados a través de amigos o familiares no dejan rastro. Conozco a dos periodistas que están investigando dónde fueron a parar los diez millones de comisión por fichaje de Lewandowski. Todo el mundo sabe sumar, Jan: y 9+1 efectivamente hacen diez. Pero lo que sobre todo tienes que hacer es rectificar el escándalo de los turcos, porque si no rectificas te lo encontrarán, y cuando te digo “te lo encontrarán” quiero decir que te lo encontrarán todo, y te lo encontrarán con mala leche, y será mucho mayor el precio que acabarás pagando que el que esperabas ganar.
Ya sé que no me harás caso y que además te enfadarás, y que en este artículo no verás el trazo de ningún amor sino solo una forma de exponerte y atacarte. Sé que no servirá de nada, pero déjame decirte que el trazo del amor está ahí, y que no hay ningún ataque, y que si sigues como hasta ahora tomarás un mal irreparable. Piensa. Cálmate. Mereces un destino mucho mejor que lo que te estás labrando.
Esta es la mayor diferencia que existe entre ti y yo, Jan: que yo creo mucho más que tú que el buen chico que solía haber dentro de ti todavía no ha muerto del todo y quiere salvarse".