El ex del Madrid siempre fue un especialista en paradas salvadoras. Reflejos, intuición y experiencia se unieron en dos actuaciones a bocajarro que mantuvieron a flote a los suyos cuando más lo necesitaban antes del golazo del mexicano Herrera.
En la primera, cuando se llevaban jugados 20 minutos de partido, Casillas sacó una buena mano a un tiro a quemarropa ante el que reaccionó en el momento justo (minuto 0:30).
La segunda intervención del de Móstoles fue incluso mejor. Una dejada en el área permitió a Pizzi plantarse solo ante el meta, que mató sus ilusiones de gol con una magnífica respuesta en décimas de segundo (minuto 1:25).
16 de abril de 2018