El Oviedo se las vio y se las deseó para sumar un punto en su feudo. Los del 'Cuco' Ziganda se encontraron con el premio de un penalti, ya que fueron claramente superados por Las Palmas, sobre todo en la segunda mitad.
Aun así, las ocasiones tardaron en llegar en el Carlos Tartiere. Los primeros minutos fueron de tanteo entre ambos equipos, aunque poco a poco los locales fueron inquietando la portería defendida por Raúl Fernández.
Sin embargo, un error tonto de Fabio González, que derribó a Viti en el área, dio la oportunidad al Oviedo de adelantarse en el marcador. Y Borja Bastón no falló. El 'killer' no se puso nervioso y asestó el primer golpe a su equipo.
El gol sentó como un jarro de agua fría para Las Palmas, que se mostró bastante imprecisa en la recta final de la primera mitad. El colegiado mandó a ambos equipos a vestuarios y los del 'Cuco' Ziganda se fueron con la satisfacción del deber cumplido.
La segunda mitad fue otra historia. A pesar de que Borja Bastón intentó una chilena a lo Zlatan Ibrahimovic que tocó en el palo, el Oviedo dio un paso atrás y eso se notó, para bien, en el conjunto visitante.
Pepe Mel movió el banquillo y dio entrada a Alberto Moleiro, que revolucionó el choque. El joven fue un auténtico puñal por la banda izquierda de su equipo y la zaga del Oviedo no fue capaz de detener sus galopadas.
Tal fue así que, en el minuto 72, el canterano puso un centro medido al área tras una genialidad suya en el costado y Kirian remató totalmente solo al segundo palo. Las Palmas logró el merecido empate y además se lanzaron a por el triunfo final.
La recta final tuvo dueña y ese fue el equipo que jugó a domicilio. Mujica tuvo en sus botas la sentencia, pero Femenías se anduvo raudo para abalanzarse sobre el jugador amarillo.
El Oviedo pidió la hora y con razón. Moleiro, desde la frontal del área, tuvo el tanto de la victoria, aunque el tiro se marchó por milímetros. No hubo tiempo para más y ambos conjuntos firmaron un empate que vino mejor a unos que a otros.