La acción tuvo lugar la noche del sábado 21 o madrugada del domingo 22 de diciembre, según informa el diario local 'Kvällsposten'. Desde su inauguración, a la que acudió el propio Ibrahimovic, se han registrado ya varios actos vandálicos contra el monumento.
La estatua, de casi 3 metros y unos 500 kilos de peso, muestra al jugador en pantalón corto, con el torso descubierto y alzando los brazos en uno de sus típicos gestos de celebración de un gol.
En la inscripción, se recuerdan algunas de sus proezas deportivas en los clubes por los que ha pasado, incluido el Barcelona, el Ajax y el Manchester United, así como en la Selección Sueca.
En los meses pasados, aparecieron pintadas junto a la estatua o se ha cubierto su cabeza con bolsas de plástico, entre otras muestras de hostilidad hacia el astro sueco, actualmente sin equipo.