El ex futbolista del Liverpool asume el desafío del conjunto escocés, que confía en recuperar la gloria de otrora y competir al máximo nivel, tras perder descender cuatro categorías en 2012 por problemas económicos.
La llegada de Steven Gerrard no hizo si no disparar la euforia en el Ibrox Stadium, donde se congregaron 41.000 espectadores para asistir a un amistoso ante el Bury, de la cuarta división inglesa, que acabó con goleada ilusionante.
Este jueves, el Rangers FC se mide al también modesto FK Shkupi de Macedonia, rival, a priori, asequible para el cuadro escocés, que aún teme los fantasmas del año pasado ante el Progrès Nidderkuer en la fase previa de la Europa League.
En este sentido, el propio Gerrard quiso enfatizar en la humillante derrota como aprendizaje: "La charla del equipo ya está hecha, alguien hizo eso por mí hace 12 meses. No estoy nervioso ni asustado".
La leyenda 'red' debuta en la Europa League en su estreno como entrenador en un encuentro oficial, henchido de confianza e ilusión por plasmar su ideosincracia futbolística en el Rangers FC.