Todo el Villamarín se puso en pie a falta de diez minutos para el final del partido. La afición verdiblanca reconoció la clase de Lo Celso y el golazo que había presenciado.
Sanabria, autor del primer tanto, asistió al argentino dentro del área, que con un sutil control de tacón y con un punterazo batió a Frising. El gesto técnico fue exquisito.
4 de octubre de 2018
Y la fiesta todavía no había terminado. Tello no sacó la varita, pero sí la moto. El extremo corrió por la banda con la mirada puesta en Joaquín, quien lanzó una contra de libro.
El de El Puerto de Santamaría condujo el balón hasta el momento preciso y se la cedió a un Tello que definió con su pierna izquierda y por debajo de las piernas del guardameta del equipo luxemburgués.
4 de octubre de 2018