El Zaragoza, tras las dudas de las últimas semanas, sacó casta para vencer a la Ponferradina en La Romareda. Un triunfo que le otorgó la tercera posición, una plaza ventajosa de cara a encarar los 'play off' de ascenso.
"Nosotros hemos hecho nuestro trabajo, que era ganar y recuperar buenas sensaciones. Hay una alegría tremenda en el vestuario y ahora nos toca esperar a ver quién va a ser nuestro rival en el 'play off' y también las fechas", aclaró el técnico del cuadro aragonés.
"Lo que ha ocurrido ha sido algo impactante para todos por la cantidad de afectados en un equipo. Esto cambia todo. Vamos a ver lo que ocurre, todos los equipos estamos expuestos al mismo riesgo. Va a ser una temporada larguísima, muy dura y estresante", añadió.
Y cerró: "Que la afición esté tranquila, no nos vamos a rendir y vamos a seguir peleando. Ahora cambia el escenario. Somos un equipo repudiado, un equipo contra el que todo el mundo quiere jugar. Nadie cree en nosotros... muy bien. Vamos a ver lo que dicta el terreno de juego, vamos a prepararnos".