River Plate saboreó las mieles del éxito y no hubo un mejor lugar para hacerlo que en La Paternal. Los pupilos de Marcelo Gallardo, impulsados por la efectividad de los hombres de refresco, supieron apretar en el momento justo y asestar el golpe definitivo al 'Bicho'.
Y eso que en frente tuvieron a un rival que no le puso las cosas nada fáciles. Argentinos Juniors generó su propia estrategia y en varias facetas del choque desconcertó al conjunto dirigido por Marcelo Gallardo.
El 'Bicho' regaló el balón al 'Millonario' y se dedicó a buscar a sus hombres de arriba para tratar de sorprender a la defensa. Y en algunos momentos puntuales, Armani tuvo que hacerse grande bajo los palos para evitar males mayores.
Poco a poco, los visitantes fueron quitándose la dura coraza del comienzo de las hostilidades y empezaron a generar peligro sobre la portería de Lanzillotta. Sin embargo, y tras varios intercambios de golpes por parte de los dos equipos, ambos se marcharon al vestuario con el 0-0 inicial en el marcador.
En la segunda mitad, Gallardo comenzó a gestionar su estrategia, que no fue otra que la de introducir modificaciones en el once. Beltrán sustituyó a Solari y River ganó más movilidad arriba. pero eso no solucionó los problemas del 'Millonario', ya que Argentinos seguía llegando y metía atrás a los hombres del 'Muñeco'.
Las modificaciones en los visitantes se sucedieron muy pronto comenzaron a surtir efecto. Fue en el minuto 66 y de una forma magistral. Juanfer Quintero se armó de valor y se dispuso a sacar una falta que terminó con Lanzillotta recogiendo el esférico del fondo de la red tras un virulento golpeo del colombiano que introdujo el balón por todo la escuadra.
Dicho tanto dejó completamente grogui a Argentinos y apenas tres minutos más tarde, River le asestó el segundo golpe. En un error en la salida de balón local, Beltrán se aprovechó y con mucha picardía, y sangre fría, picó el esférico por encima del portero para colocar el 0-2.
El 'Bicho' trató de reaccionar, pero el daño ya fue demasiado grave. River comenzó a gustarse y la frustración se apoderó del conjunto de Gabi Milito. A falta de diez minutos para el final, Palavecino sentenció el encuentro.
Jugada colectiva de todo el 'Millonario', que dejó la pelota en los pies del centrocampista para que sacara a pasear su cañón y batiera, por tercera vez esta noche, a Lanzillotta. Todavía hubo tiempo para el gol de la honra local, pero Armani siguió en su buena línea y lo evitó.
Con esta victoria, River Plate suma 35 puntos y se coloca en la zona alta de la clasificación, a pesar de que el título ya sea una auténtica utopía.