El Crystal Palace ganó su particular batalla en invierno tras retener a un pretendido Wilfried Zaha, que decidió quedarse en tierras londinenses. Al margen de ello, el mercado no fue especialmente fructifero para los 'eagles'.
El único fichaje que llegó para el primer equipo fue el delantero Cenk Tosun, a préstamo desde el Everton, mientras que incorporaron al joven Scott Banks desde las categorías inferiores del Dandee United. Pero esos no eran los únicos movientos que querían cerrar.
Según publica el 'Daily Mail', el Crystal Palace intentó reforzarse con un extremo y un defensa para dar otro aire al equipo, pero no tuvo éxito, ya que sus dos objetivos acabaron dándoles calabazas.
Exactamente, la entidad de Londres quiso hacerse con el extremo Jarrod Bowen y tuvo un acuerdo con el Hull City, pero el futbolista optó por marcharse al West Ham United.
Además, el Crystal Palace intentó fichar al defensa Nathan Ferguson, pero este fue rechazado tras no superar el examen médico. Dos operaciones frustradas para el conjunto londinense, que se conformó con el delantero turco como único refuerzo invernal.