Los médicos alemanes se oponen al fútbol con público

Los partidos deben jugarse a puerta cerrada. Los médicos alemanes lo tienen claro.

"El peligro de contagios masivos sería real. Si tenemos mala suerte tendríamos un supercontagiador entre los espectadores y el virus se extendería como un fuego", dijo la presidenta del sindicato, Sussane Johna en declaraciones al 'Neuen Osnabrücker Zeitung'.

Johna expresó también su escepticismo ante el plan de la Liga de Alemania de Fútbol (DFL) para permitir un regreso limitado de público que deberá ser discutido este lunes por los ministros de Sanidad de los estados federados.

"Lo traicionero del coronavirus es que alguien puede sentirse perfectamente bien y tener la infección en la garganta. En medio de celebraciones, gritos y júbilo los contagios pueden multiplicarse muy rápidamente", dijo.

La DFL ha sugerido un plan que incluye suprimir la venta de alcohol en los estadios, eliminar los puestos de pie para los espectadores y el contingente de entradas para los equipos visitantes además de una reducción de los aforos.

"Los esfuerzos de la DFL son comprensibles. Pero no es realista pensar que esas medidas sirvan para prevenir contagios", dijo Johna.

"No creo que cuando su equipo marque un gol, los espectadores se queden sentados en sus asientos. Lo que harían sería levantarse y abrazarse, lo que es perfectamente humano", explicó.