Rafa Benítez tuvo que dejar de entrenar en la Premier League y levantarse del banquillo del Newcastle al no llegar a un acuerdo para renovar su contrato. Así lo ha contado en una carta en 'The Athletic.
"Después de tres años de promesas incumplidas no creía a la directiva del Newcastle. Tuvieron un año para solucionar mi contrato pero no me ofrecieron una oferta que pudiera aceptar", escribió.
El entrenador español aseguró que la oferta del Newcastle fue la de tener el mismo salario e incluso contar con un menor control en los fichajes.
"Su idea de proyecto era tener a jugadores por debajo de 24 años y después de la reunión supe que no volverían con una oferta seria", continuó.
Además, Benítez reveló que a su cuerpo técnico no se le pagó la prima por haber permanecido en la Premier League: "Lo sentí como un castigo por no firmar una renovación. Yo sabía que no habría una oferta apropiada".