Sigue apretándose el descenso en la Premier League. Mientras unos dan un importante paso hacia la salvación, otros sólo siguen peleando gracias al demérito de sus rivales.
Entre los primeros encontramos al Southampton, que venció 3-1 a los 'wolves'. Redmond a los dos minutos adelantó a los 'saints', Boly igualó en el 28' y el propio Redmond, dos más tarde, volvía a poner por delante a los locales. Shane Long, mediado el segundo tiempo, hizo el 3-1 definitivo.
También ganó el Fulham, sin duda la gran decepción de esta Premier. Craven Cottage celebró una victoria de los suyos por primera vez en mucho tiempo. Caimey, nada más volver del descanso, y Ryan Babel, mediado el segundo periodo, mandaron al Everton de vuelta a Merseyside con cara de no entender nada de lo sucedido.
El Bournemouth ganó, goleando, el Brighton & Hove Albion. Cinco goles les metieron los 'cherries' a los 'seagulls'. Gosling hizo el primero pasada la media hora de juego, y los cuatro restantes se anotaron en el segundo tiempo. Fraser, Brooks, Wilson y Stanislas hicieron el resto.
Esa derrota del Brighton evitó que el Cardiff se metiera en peores problemas de los que ya está. Con quince puntos aún en juego, debe recortarle cinco a los 'seagulls', pero estos tienen 18 todavía por sumar como máximo. Difícil, pero no imposible.
Aunque puede serlo si el cuadro galés sigue encadenando derrota tras derrota. Ante el Burnley, en Turf Moor, el Cardiff sumó la tercera consecutiva, y la cuarta en sus últimos cinco duelos.
Un doblete de Chris Wood, en el 31' y el 92', dejó al Cardiff en la cuerda floja. El Burnley, con este triunfo, ha dejado prácticamente sellada su permanencia un año más en la Premier League.
La jornada de este sábado se completará con el Manchester United-West Ham, y este domingo continuará con los Crystal Palace-Manchester City y Liverpool-Chelsea. Culminará el lunes con el Watford-Arsenal.