Muchas críticas han surgido a la Liga Bielorrusia por seguir en juego. En mitad de la pandemia del COVID-19, que ya se ha cobrado 46.000 víctimas en todo el mundo, hay una competición que resiste.
Sin embargo, dentro del propio país surgen también las críticas. Los aficionados más peligrosos del Neman Grodno y del Shakhtyor Soligorsk han pedido al resto que no se desplacen a los estadios en los partidos.
"Quedémonos en casa, reduzcamos los riesgos asociados de conllevaría una propagación del virus. Protégete y protege a tus seres queridos", explicaron en un comunicado los ultras del Neman Grodno.
Poco después serían los radicales del Shakhtyor Soligorsk los que se sumarían a la petición de los ultras del Neman Grodno. Cabe recordar que la competición vuelve a escena este fin de semana.
Todos se unen en contra del presidente de Bielorrusia, Aleksandr Lukashenko. "En los pueblos, el tractor cura a todo el mundo. Los campos curan a todo el mundo. Digo mucho, en broma, que el alcohol no solo sirve para lavarse las manos. Hay que tomar 100 mililitros al día para envenenar al virus, aunque no en el trabajo", dijo el mandatario.