La carrera de Mario Balotelli ha estado plagada de subidas y bajas. Buenas y malas decisiones que se han juntado en una vorágine en la que ya no se distinguen lo deportivo de lo extradeportivo.
En el primero de los ámbitos, el jugador italiano ha tenido muchos altibajos contra el que será su siguiente rival, el Dijon. El ariete ha disputado cuatro partidos ante ellos, con unos números más que aceptables.
En 2016 consiguió un doblete que le dio la victoria al Niza, aunque en la segunda vuelta de aquella misma temporada se quedó sin marcar. Pese a todo, su equipo volvió a llevarse los tres puntos.
Su partido más estrambótico fue el 5 de noviembre de 2017. El Niza se impuso 1-0 gracias a un penalti marcado por 'Super Mario'. Pero sacó su peor temperamento en los instante finales del partido.
En el minuto 89 vio una tarjeta roja directa por una dura entrada por detrás an un rival. No contento con eso, el italiano se encaró con el colegiado y tuvo que ser parado por su propio cuerpo técnico.
El choque más reciente, hace casi un año, ha sido la única derrota que ha sumado ante el Dijon. Su equipo cayó por 3-2 y el se quedó sin 'mojar'. Sus enfrentamientos ante el Dijon han sido, como todo lo que rodea a Balotelli, una amalgama de luces y sombras.