Lukaku sigue siendo Lukaku y el Inter sigue siendo el Inter, pero no todo sale siempre bien. El belga marcó el primer tanto del equipo en su visita al Torino de la jornada 27 en la Serie A para darle contnuidad a su buen hacer en la lucha por el 'Scudetto'.
Lo hizo desde los once metros en el ecuador de la segunda mitad. Izzo no midió bien una entrada y el delantero, ya colocado para gopear la bola desde el punto fatídico, superó al cancerbero rival con un golpeo potente y bajo que este no fue capaz de adivinar.
El problema fue que Sanabria apareció tan solo ocho minutos más tarde para igualar el luminoso. Un saque de esquina generó una carambola brutal en el área de Handanovic y ahí estaba él, en el lugar adecuado y el momento preciso, para meter el pie y mandar el esférico a la red.
Quedó así todo tal y como empezó de cara al tramo final del enfrentamiento. Hizo bien el Inter al colmar el área rival hasta forzar una pena máxima, pero no defendió bien en el 1-1, si bien los jugadores de Conte se quejaron mucho de que la jugada debió ser anulada.