Habrá 'Derby della Madonnina' en Coppa. Y todo gracias a Romelu Lukaku. El delantero, que inició el choque en el banquillo, apareció en la prórroga para desequilibrar la balanza en el 119' y llevar al Inter a cuartos de final.
La Fiore opuso resistencia, aunque los visitantes llevaron el peso del choque al inicio. Lautaro y Eriksen tuvieron alguna opción en la primera parte, así como Alexis, que mandó un balón a la madera, pero el que rompería el 0-0 sería Arturo Vidal desde los once metros.
El chileno transformó una pena máxima sobre Alexis Sánchez de Terracciano, meta que falló a tiro de Eriksen y que derribó al ex del United en el rechace. No lo vio el colegiado en directo, pero sí el VAR. El centrocampista sumó su primer tanto con el cuadro lombardo con un tiro raso, centrado y efectivo.
Antes del descanso, la Fiore sufrió la jugada al contrario. Pena máxima que, tras acudir al monitor, anuló el árbitro. Así se llegó al final de la primera mitad.
Empezó mejor el cuadro 'viola' el segundo tiempo, aunque erró Lautaro Martínez una clara ocasión que pudo significar el 0-2. Solo, el argentino mandó el tiro fuera en el área.
El que sí encontró el gol fue la Fiorentina por medio de Kouamé. El delantero firmó un gran tanto al mandar a la escuadra un balón desde la media luna en el 57' para poner el 1-1 en el marcador.
El empate duró hasta el final de los 90 minutos, con el Inter dejando pasar varias oportunidades claras para sellar el pase en las botas de Achraf y Alexis, entre otros.
En la prórroga, y cuando ya todos pensaban en la tanda de penaltis, Lukaku mandó a la red un gran centro de Barella desde la derecha. El delantero belga entró en la segunda parte del tiempo reglamentario y fue decisivo, aunque lo tuvo fácil, ya que estaba completamente solo en el área. Curiosamente, el asistente piropeó al goleador poco antes del choque.
Así, habrá 'Derby della Madonnina' en cuartos de final, tras el pase del pasado martes del Milan en penaltis ante el Torino.