Lukaku siempre está cuando el Inter golea. O, al menos, casi siempre, pues suele ser él bastante responsable del resultado. Repitió operación en el encuentro amistoso de pretemporada ante el Lugano, de la Liga Suiza, y vio puerta desde los once metros.
La defensa visitante llevaba todo el partido bastante blandita. Ya encontraron los huecos necesarios Lautaro y Alexis Sánchez para romperla y él también recogió su premio. Una internada en el área culminó con pena máxima y le tocó ejecutar el lanzamiento.
Optó por una 'paradinha' que sirvió de introducción a un chut raso y pegadito al palo diestro del guardameta, que se lanzó justo al lado contrario. No tuvo ni la más mínima oportunidad de detener el esférico, que se acopló en el fondo de la red sin oposición.
Que él y Lautaro hayan marcado da buena cuenta de lo bien que están los de Antonio Conte de cara al comienzo de la Serie A. Por delante, tienen una empresa de lo más complicada: discutirle el dominio de la Serie A a la Juventus y seguir en lo más alto.