Marcelino pidió perdón a la afición; Cervera destacó la apuesta arriesgada del Cádiz

El Cádiz sorprendió al llevarse los tres puntos de San Mamés con una victoria por la mínima frente al Athletic Club (0-1). Este triunfo supuso el segundo de los andaluces en la presente campaña y ayudó a que asomaran la cabeza en la zona baja de la tabla.

Marcelino, técnico del cuadro vasco, lamentó profundamente la derrota de este viernes. "Si nos podemos impacientes tenemos que dedicarnos a otra cosa, tenemos que pedir perdón a la afición", explicó el técnico, visiblemente afectado por el resultado.

"Jugamos en casa y con el público volcado, pero no comparecimos. Al final, ganó el mejor, tenemos lo que merecemos", añadió el entrenador, que admitió que la derrota fue una sorpresa: "Me deja muy triste, no esperaba esto, estoy jodido".

Iñaki Williams ofreció un mensaje similar al de Marcelino: "San Mamés tiene que ser un fortín. Por unas cosas u otras no terminamos de solventar.  Con estos partidos va a ser complicado pelear por Europa. Nos toca reflexionar, hay que mejorar muchas cosas".

Por su parte, Álvaro Cervera mostró un análisis positivo de la victoria del Cádiz: "Hemos hecho una buena primera parte, con y sin balón, y en la segunda ha sido un ejercicio de supervivencia como muchas otras veces porque ya no nos daba para salir, pero les hemos frenado más o menos bien".

"Tres puntos más y una buena primera parte. Con eso nos tenemos que quedar", incidió el técnico, quien se felicitó también del resultado de la apuesta "algo más arriesgada y ofensiva" que en partidos anteriores, con el éxito de mantener "la esencia de defender bien".

"Nos hemos dado cuenta de que con el juego de antes no nos da porque en Primera cualquier equipo y cualquier jugador te mete un gol en cualquier jugada. En la segunda parte se han volcado y lo hemos pasado mal, pero hemos sacado tres puntos que para nosotros son fundamentales", concluyó.

Salvi, autor del único gol del partido, compareció ante las cámaras tras la conclusión del encuentro. "Estoy feliz y contento por llevarnos los tres puntos a casa porque nos hacían falta, y también por volver a marcar y quitarme esa espina", explicó el jugador.