Las donaciones la realizaron aficionados, que durante el Tour del trofeo de la Europa League de la pasada temporada, donaron el calzado para los niños desfavorecidos de Zaatari como parte del proyecto de apoyo a los 80.000 refugiados desplazados sirios.
La Fundación para la Infancia de la UEFA, que ya había proporcionado terrenos de juego para los niños, aseguró que las botas donadas ya están siendo utilizadas durante los entrenamientos diarios y torneos semanales organizados por el programa de fútbol en el campamento de Zaatari.
El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, agradeció el gesto de los aficionados que "han ayudado a marcar una diferencia real".