A falta de Neymar, siempre es bueno contemplar a Mbappé. Un conformismo egoísta, sobre todo cuando eres el PSG y tienes a dos de los mejores jugadores del mundo en apenas una parcela de césped.
Lo del francés en Niza fue llegar y besar el santo. El '7' reapareció de la lesión sufrida ante el Galatasaray y terminó por sentenciar el partido en dos cabalgadas. A medio gas, sin forzar demasiado.
Entró en el 83' en sustitución de Sarabia y apenas tardó cinco minutos en dejar su selló en el partido. Jugadón de Di María, excelso en la tarde-noche del viernes, rechace del portero y remate raso del internacional 'bleu'. Cinco minutos.
Algunos quitarían el partido, pero aún quedaba el último destello. Contragolpe de libro del equipo de Tuchel, apertura a banda del 'Fideo' a Mbappé y pase de la muerte a Icardi: así se escribe un 'póker'.
18 de octubre de 2019, reaparición, asistencia y gol de Mbappé para volver dar alas a un PSG que asusta más cuando el francés entra en escena.