Militao estuvo a punto de abrir la lata en la portería en la que no tenía que hacerlo poco antes de cumplirse los primeros 20 minutos del encuentro de Liga entre el Real Madrid y Osasuna. Los de Zidane manejaban con calma la posesión cuando él cometió un error que pudo ser fatal.
Algo alejado de la frontal de su área y no muy presionado por los atacantes del elenco navarro, le dio un pase pésimo a Courtois. No solo lo dirigió mal, sino que le imprimió demasiada fuerza como para que el cancerbero se moviera rápido y lo interceptara.
Thibaut tuvo que correr hacia sus palos para, ya con más calma cuando había superado el esférico, recogerla y darle continuidad a las combinaciones de los blancos. Poco después, de hecho, el guardameta hizo una gran parada en una de las primeras buenas ocasiones de los pamplonicas.
Lo curioso del fallo de Militao también estuvo en su gesto después de errar. Se llevó las manos a la cabeza y se quedó mirando al belga, al que pidió perdón con el brazo después de que este salvara la papeleta. Afortunadamente para el Madrid, todo quedó en un susto.
May 1, 2021