Es fútbol, no tiene otra explicación lógica. 77 días. Ese ha sido el plazo de tiempo en el que el Mirandés, literalmente, ha pasado de suspender amistosos por falta de fichajes y efectivos por "sobrecarga fisica" a ocupar el ascenso directo a Primera División en 10 jornadas.
El club de Anduva publicó este comunicado el pasado 3 de agosto: "Ante la especial situación de ralentización que atraviesa el mercado de jugadores profesionales actual, sumado a la situación de sobrecarga física de los actuales jugadores en plantilla, propia de esta fase de pretemporada, ha decidido suspender el encuentro amistoso del próximo sábado 3 de agosto que se iba a celebrar en el estadio de Anduva entre el Club y el RCD Mallorca".
Volviendo al presente, el Mirandés se medirá al Real Oviedo en el estreno de la undécima fecha con la moral por las nubes. Los de Alessio Lisci tumbaron al Eibar por 1-0 gracias al tanto de Joaquín Panichelli, épica que le brindó la segunda plaza del campeonato con 18 puntos de 30 posibles.
La ilusión se ha apoderado de los 'jabatos', centrados en certificar la permanencia matemática lo antes posible. Y a partir de ahí, pensar en nuevos objetivos si las matemáticas lo permiten y restan jornadas de Segunda División para ello. Una historia con tintes milagrosos.
October 20, 2024