Ya es sabido por todo el mundo que José Mourinho no tiene pelos en la lengua a la hora de criticar la acción de cualquier persona. Anoche, ante el Sevilla, le tocó a sus propios médicos.
Según el técnico luso, la lesión sufrida por Ander Herrera no es más que una recaída de un problema precedente: "Tenía un pequeño problema y lo paramos un par de partidos, pero el departamento médico me aseguró que estaba al cien por cien preparado para jugar ante el Huddersfield el sábado".
"Lo reservé para protegerlo aún más y ahora vemos que realmente no estaba al cien por cien. Los médicos me dijeron que podía contar con él sin problemas el sábado", comentó en rueda de prensa el entrenador del United.
!Aun así no jugó y pasaron domingo, lunes y martes. Y ahora parece evidente, viendo cómo se lesionó al hacer la presión sobre el mediocampo del Sevilla, que no era cierto que estaba en plena forma", sentenció.