Deadpool 'salvó' la vida de la esposa de un jugador: "Había planeado mi funeral"

Este 2024 a nivel cinematográfico está marcado por el estreno de la tercera entrega de Deadpool, que contará de nuevo con la participación de Ryan Reynolds como Wade Wilson y el retorno a la pantalla grande de Hugh Jackman como 'Wolverine' (Lobezno), al que se le ha visto en alguna ocasión siguiendo los partidos del Wrexham, del que es copropietario el actor canadoestadounidense.

El conocido actor adquirió el club galés en 2021 junto con Rob McElhenney, con el gran objetivo de colocarlo en la Premier. Actualmente, el equipo ocupa la 2ª posición de la League Two y está en la 4ª ronda de la FA Cup, donde se medirá con el Blackburn Rovers en Ewood Park.

Se desconoce si Ryan Reynolds estará presente en el encuentro pese a que recientemente terminó el rodaje de Deadpoool 3. Lo que sí hay que resaltar es que el copropietario del club, antihéroe en el cine, fue héroe en la vida real después de cambiar por completo la vida de la familia del futbolista Anthony Forde, un hecho que se conoció en el capítulo 14 de la segunda temporada de la serie documental 'Bienvenidos al Wrexham' que se emite en 'Disney+'.

Y es que el mediocentro, al poco tiempo de ser padre, recibió la noticia de que Laura Mangan, su esposa, tenía un tumor cerebral maligno tras someterse a una resonancia. Eso llevó al futbolista a abandonar el equipo el día 28 de febrero. Tanto el actor como Rob McElhenney conocieron el caso gracias al técnico y decidieron ayudarles con una segunda opinión en Nueva York, por lo que costearon una cita con un neurocirujano.

"Dijimos que no quería saber cuánto me quedaba. Mi hijo Paddy solo tenía cuatro semanas y me estaban diciendo que no le vería cumplir un año. Planeaba mi funeral mientras le daba de comer por la noche", aseguró la mujer en una entrevista concedida a 'The Sunday Times'.

Cuando habían perdido toda esperanza, el neurocirujano le pidió a Laura que se hiciera una biopsia y los resultados fueron tranquilizadores, ya que el tumor era benigno: "Primero estaba en shock, no podía creérmelo. Me encontraba tan vulnerable... Pero sentí que debía estar más feliz. Acababa de pasar las peores siete semanas de mi vida, y con un recién nacido. Ryan es nuestro ángel de la guarda".

Ese gesto fue determinante para que la vida de una familia cambiase por completo para bien. Desde entonces, la esposa de Anthony Forde se somete a continuos controles para que el tumor no avance. Por su parte, el futbolista, tras ausentarse 6 semanas para estar con su mujer, volvió a la rutina y se reincorporó al equipo. "Ryan nos ayudó. Él no tenia por qué hacerlo", aseguró el mediocentro, que estará de por vida agradecido a Ryan Reynolds.