Mertens, a sus 34 años, sigue siendo un referente tanto del Nápoles como de la Selección Belga. Pero su relevancia, al menos en su club, ha ido decreciendo año tras año. Este podría ser el verano de su adiós.
Llegó en 2013, procedente del PSV. Y en el Nápoles se consagró como un auténtico fuera de serie. Pero la edad no perdona, y es un hecho que cada temporada ha ido jugando menos y menos.
Y sigue cobrando un salario de estrella, unos nueve millones de euros que maniatan en cierta medida al Nápoles a la hora de moverse en el mercado.
Según el 'Corriere dello Sport', el Nápoles valoraría acceder a su venta, siempre y cuando llegase una buena oferta por él. Ahora mismo, por edad y rendimiento, su valoración ha caído por debajo de los diez millones de euros, pero el Nápoles probablemente aspire a algo más.