La mayor necesidad del Nàstic de Tarragona no pudo con la calma de un Almería con un buen colchón de puntos y que ha alternado en lo que va de campaña actuaciones interesantes con otras bastante decepcionantes.
En los 90 minutos del choque de Tarragona se vieron las dos caras de los andaluces. Empezaron dormidos y encajaron el primer tanto rápido por mediación de Imanol García, recuperado para la causa por uno de sus mentores en Osasuna, Enrique Martín.
El Nàstic mereció ampliar la ventaja, pues llegaba mucho con Manu Barreiro y un activo Luis Suárez, aunque mediada la primera parte el Almería empezó a reaccionar y comenzó a convertir en protagonista a Isaac Becerra.
Cuando ambos equipos ya miraban al descanso, dos zarpazos de los de Fran Fernández a balón parado sacaron a la luz todos los defectos del Nàstic. Se durmieron los catalanes en dos acciones a balón parado y Owona dio la vuelta al marcador con dos certeros cabezazos en cinco minutos.
Tras el descanso, el Nàstic lo buscó más y empezó a arrinconar al Almaería. A menos de media hora para el final, una acción a balón parado permitió a Manu Barreiro rematar solo para hacer el 2-2 y dio comienzo un nuevo partido, en el que los locales arriesgaron más y los visitantes acabaron por dar por bueno el punto.
Un empate que pudo evitar Sebas Coris -se topó con René- y que deja al Nàstic como colista, aunque aún con algo de vida. El Almería, con la igualada, seguirá en mitad de la tabla y sin demasiados agobios.