Lo que ha hecho Ndombélé para volver al Olympique de Lyon no se ve todos los días. Como no había acuerdo entre los clubes, acordó que pagaría de su bolsillo la diferencia entre la oferta y la demanda.
Salió del Tottenham a última hora por voluntad propia. Quería volver al Olympique de Lyon, aunque la operación a todas luces era del todo inaccesible para el club galo.
Sin embargo, gracias a la predisposición del jugador, pronto llegaron a un acuerdo: se iría cedido, con una opción de compra incluida por cortesía, ya que asciende a 65 millones de euros, algo imposible de pagar por el Lyon.
El problema llegó cuando tocó hablar de quién pagaría el salario del jugador. Lo normal es que lo asuma el club de destino, pero en ocasiones ambos equipos acuerdan compartir gastos. En casos más raros, el club de origen se hace cargo de todo, lo que sea por perder de vista un tiempo a su jugador, parece.
En este caso, el Tottenham dijo que de ninguna manera iba a mantener al futbolista, a quien le quedan por cobrar, según 'L'Équipe', diez millones de euros. Los 'spurs' se plantaron en siete millones, una cantidad que, sumada al millón que le iba a costar al Lyon, lindaba con lo imposible, económicamente hablando. Se ofrecía a pagar solo tres de los diez.
Y entonces Ndombélé hizo algo que pocas veces se ha visto hacer a un jugador. Acordó con ambos clubes que él pagaría la diferencia, esos cuatro millones de salario que separaban a ingleses y franceses.
Así que podría decirse, sin miedo a equivocarse, que Tanguy Nombélé está pagando por jugar en el Olympique de Lyon. En cierto modo, claro está.