Neymar llega a la edad de los mitos

Un 5 de febrero de 1992, en Mogi das Cruzes, Sao Paulo, Nadine Santos daba a luz a Neymar Junior. El bebé, que posteriormente sería niño prodigio del fútbol brasileño, alcanza la madurez este martes alejado de los campos por otra inoportuna lesión y con muchos sueños todavía por cumplir.
Llega a una edad clave, esos 27 años que ya están mitificados por la sociedad y que muchos grandes de otras disciplinas no lograron superar. Salvando las enormes distancias, Neymar también llega a la cifra deprimido, sin poder hacer lo que más le gusta, y alejado de ser esa gran estrella que todos auguraban que iba a ser.
Lejos de triunfar después de escapar por la puerta de atrás del Barcelona, el brasileño ha terminado obviado en la lucha por el Balón de Oro y tampoco estuvo a un nivel excelente en un Mundial en el que se esperaba que fuera uno de los reyes.
Así, los 27 años se presentan claves para saber si puede recoger el testigo de Leo Messi o un Cristiano Ronaldo que también cumple años este 5 de enero o, por el contrario, termina de verse arrollado por Mbappé, Dembélé y las nuevas generaciones.
"Puede ser lo que quiera, todo está a su alcance. Es rápido, hábil y sobresale en el uno contra uno. Lo tiene todo", dijo en su día el argentino de él. "Me gusta mucho Neymar. Es un poco como yo. ¿Puede ser el heredero de Messi? Sí, tiene todo lo que necesita para ser tan fuerte como él", añadió en su momento el astro luso.
Ambos siguen esperando la llegada de un futbolista que pueda hacerles sombra próximamente. Muchos lo han intentado, incluido Neymar, pero ninguno lo ha conseguido de momento.
La sombra de los 27 ya pesa sobre el brasileño, que está a una distancia sideral de su amigo Messi cuando el argentino tenía esa edad y ya había coleccionado cuatro Balones de Oro y había ganado 24 títulos.