El fútbol alegre y ofensivo que habitualmente campea en la Eredivise también pasa facturas a esos equipos con flaquezas defensivas. El VVV Venlo es una de esas víctimas, aunque este martes sufrió un castigo leve.
Llegaba al partido como el equipo más goleado de la Liga con 66 goles en contra. Toda una profesión de riesgo para el portero. Pero ante el Spartta Rotterdam recibió solo tres disparos a puerta... y encajó solo uno.
La mala fortuna la tomó con el VVV Venlo, ya que esa única diana fue el autogol, con algo de mala suerte, de Da Graça en el minuto 70. Se quedó a las puertas de la portería imbatida.