Su pasado espanyolista le puede y, por ello, pese a su polémica salida del RCDE Stadium, Borja Iglesias prefiere no plantearse celebrar un gol en territorio de su anterior equipo, lo que podría generar algo de controversia.
"Pues creo que no lo celebraría. Habría que verse en la situación, pero creo que es algo que no haría más por la situación en la que estamos. Les tengo mucho cariño. Allí he vivido mi primer año en Primera División, disfruté muchísimo, nos clasificamos para Europa", explicó.
Sin embargo, no se siente culpable por la decisión que tomó y es por que eso que no pedirá perdón a su antigua afición: "Ni lo voy a celebrar ni tampoco voy a pedir perdón. Si ojalá se da la situación, probablemente no haga nada".
Además, reconoció que la dinámica del Espanyol no es muy positiva en "una temporada exigente con tres competiciones". "La dinámica en LaLiga no es muy positiva. Tienes el runrún, sobre todo en casa, que no es cómodo. Es complicado vivir con eso, pero creo que tienen nivel de sobra para darle la vuelta a la situación", subrayó.
Por último, recalcó su deseo de que haya buen ambiente en la cita de este domingo. "Obviamente desde fuera no se sabe todo, pero cada uno puede pensar lo que quiera y mostrarlo como decida. Yo lo respeto completamente. Ojalá pudiésemos ir y disfrutar de cordialidad y vivir un partido tranquilo porque creo que tanto ellos (el cuerpo técnico del Betis, con Rubi a la cabeza) como yo tenemos muy buenos recuerdos del club", concluyó.