Se trata de dos jugadores que habían estado sonando para los de Thomas Tuchel durante todo el mes de enero, pero que finalmente no pudieron concretarse por diferentes motivos.
Y no sólo fueron vinculados al conjunto parisino, sino que Ndombélé y Allan destacaron en la pasada ventana de fichajes por protagonizar varios rumores sobre posibles salidas de sus clubes de origen.
Finalmente, el PSG sólo cerró la llegada de Leandro Paredes procedente del Zenit, pero su entrenador se mostró tranquilo por la falta de incorporaciones.
"No estoy enfadado, tenéis que saber que el mercado de invierno es complicado. ¿Quién quiere perder a un jugador ahora? Hay pocas posibilidades para recomponer un equipo en enero. Si me preguntas, estoy contento con Paredes. Dije claramente que sí porque puede ser importante para nosotros. Tiene calidad y personalidad. Creo en mis jugadores", apuntó.