En Butarque no hay rebajas. Si quieres ganar, vas a sudar y sufrir para ello. Y Leganés y Levante dejaron claro que no querían 'hacer precio' y conceder una victoria para ninguno de los dos lados.
El comienzo del choque no pudo ser más igualado. Ambos conjuntos se dispusieron a vender cara su piel y el vaivén de ocasiones en una y otra portería fue constante.
Pese a ello, el Leganés tuvo un par de desconexiones que, a la postre, le acabaron costando un gol. En un error de Franquesa en el control, acabó perdiendo la pelota y derribando a De Frutos en el área.
Tras unos minutos de incertidumbre donde se revisó la acción por el VAR, el colegiado señaló la pena máxima y Campaña ejecutó el penalti de forma magistral para colocar el 0-1 en el electrónico en el minuto 29.
Pero el Leganés no se iba a echar abajo ni mucho menos. La reacción 'pepinera' no tardó en llegar y apenas tres minutos más tarde, Arnaiz devolvería la igualdad al marcador en el 32'.
Jugada hilvanada a las mil maravillas por todo el equipo y pase crucial de Juan Muñoz al espacio para el '10', que se acomodó la pelota y la mandó al fondo de la red.
De Frutos siguió llevando en sus botas todo el peligro ofensivo del Levante. Sin embargo, en la recta final de la primera mitad iba a sonreír al Lega, al menos, en un primer momento.
Dani Raba cayó en el área en un forcejeo con Vezo y el colegiado acudió al VAR. La pena máxima fue una realidad y Arnaiz asumió toda la responsabilidad. Pero Cárdenas no estuvo por la labor de ponerle las cosas fáciles a su rival y atajó el disparo con una espectacular mano abajo a un potente chut.
La segunda mitad tampoco iba a dejar indiferente a nadie. Y es que el Levante comenzó con las pilas puestas, ya que un potente disparo de Pablo Martínez se estrelló en la madera y estuvo a punto de convertirse en el segundo para los granotas.
La igualdad fue máxima, pero superada la hora de partido, Arnaiz volvió a echarse a su equipo a la espalda para poner el segundo en el marcador y en su cuenta particular.
Error en la salida del balón del Levante y recuperación del '10', que se acomodó la pelota y cruzó con potencia la pelota para que se acabase colando al fondo de la red.
El Leganés supo jugar con su ventaja a favor y aguantar los arreones de los visitantes. No obstante, la recta final del choque, el cuadro de Calleja dio un paso adelante y estuvo a punto de igualar la contienda.
Pero este partido dejo claro desde el pitido inicial que iba a ser entretenido de principio a fin. Y así fue, ya que en el tiempo añadido, un mal despeje de Nyom tras un centro desde la derecha se convirtió en una oportunidad para que Róber Ibáñez, a puerta vacía, transformase el definitivo 2-2.