"No hicimos en el centro del campo lo que debíamos"

"No fue fallo del sistema técnico que presentamos en el campo (3-5-2) sino que no hicimos bien las cosas con el marcaje al hombre que habíamos establecido", declaró Klinsmann al concluir el partido disputado en el MAPFREE Stadium, y que le costó a Estados Unidos perder de local su primer partido de clasificación en 15 años.

Klinsmann fue más directo cuando dijo que la pareja formada por el centrocampista Michael Bradley y Jermaine Jones no funcionó en la primera parte cuando México dominó por completo, marcó el 0-1 y mandó dos tiros al poste, que podían haber dejado sentenciado el partido.

El técnico alemán reconoció que México jugó mucho mejor en la primera parte y que con el cambió que dio su equipo en la segunda todo cambió a su favor aunque no pudiesen conseguir la victoria.

"La realidad es que sufrimos una derrota, pero forma parte del proceso dentro de la Concacaf, por lo tanto sabemos que no es el mejor resultado, no queríamos empezar así la eliminatoria", valoró Klinsmann. "Pero los jugadores entienden que éste es un camino largo, que hemos comenzado y que también contaremos con la revancha en el Estadio Azteca, donde estaremos listos".

Sin embargo, Klinsmann también es consciente que ahora su trabajo inmediato es recuperar el ánimo de los jugadores y estar listos mental y físicamente para el duelo del martes frente a Costa Rica, en San Jose, después que el equipo "tico" logró el triunfo de visitante frente a Trinidad y Tobago (0-2).

Klinsmann admitió que tendrían que corregir aspectos importantes del juego por lo visto frente a México, que en la primera parte no pudo contrarrestar el buen fútbol que hizo el Tri.

"México fue muy intenso durante los primeros minutos, jugaron un gran fútbol, con buen toque de balón, control, y penetración fácil", señaló Klinsmann. "Positivo que nos recuperamos en la segunda parte y tuvimos nuestras opciones de triunfo, que no aprovechamos, ni tampoco dimos respuesta a la intensidad que nos presentó México al inicio del partido".

Klinsmann reconoció que se dejó de hacer trabajo importante en media cancha para arrebatar el balón y la posición a México.

"Nos costó trabajo meternos al partido. En el segundo tiempo, desperdiciamos dos posibilidades claras de gol y el partido, en general, fue intenso, vibrante. Con este resultado, ahora debemos concentrarnos en sacar los tres puntos ante Costa Rica", subrayó Klinsmann, que definió el gol de Rafa Márquez, segundo de México, como decisivo en todos los aspectos, cuando su equipo mejor jugaba.

El técnico alemán en una crítica directa al capitán del equipo, el centrocampista Michael Bradley, reiteró por tercera vez que no se hicieron bien las cosas en el centro del campo.

"La llave estaba en hacer el trabajo en media cancha, en ganar algunas batallas aisladas e individuales, y no podíamos conseguirlo en los primeros minutos. Pero en el segundo tiempo, hubo un cambio absoluto y se jugó muy bien hasta el final del partido, pero recibimos ese segundo gol, cambio la historia", agregó.

Klinsmann dijo que el mismo llegó no tanto por el acierto de Márquez sino por lo mal que ellos cubrieron el saque de esquina que hizo el defensa Miguel Layún.

"Nos sorprendió el descuido en la jugada del segundo gol. Creo que no podemos dar esas libertades, porque era un partido que ya teníamos bajo nuestro control", cuestionó Klinsmann.

Mientras, Bradley el jugador a quien Klinsmann señaló como el eslabón de la cadena que falló en el centro del campo durante la primera parte, dijo al concluir el partido que el equipo se limitó a cumplir con la estrategia establecida por el entrenador.

"Debemos admitir que todo cambió en la segunda parte cuando se hicieron modificaciones en el juego y el sistema táctico por lo que creo que al final la clarificación de ideas fue lo que marcó la diferencia", analizó Bradley. "La pregunta que hay que hacerse es por qué no salimos con el mismo esquema durante la primera parte, pero yo no la puedo responder".