Marcelo sabía que era un fijo en el lateral y que delante tenía que parar a todo un tridente formado por Mané, Firmino y Salah. Un equipo con una potencia que pretendía dejar el Madrid sin tocar el cielo con tres Champions consecutivas.
Todo eso lo pensaba el brasileño, que se ha abierto en una carta para 'The Players' Tribune' en la que ha contado todo lo que sintió en la previa y hasta en los minutos antes de que empezara a rodar el balón:"No podía respirar. Intenté no entrar en pánico. Fue en el vestuario antes de la final de la Champions contra el Liverpool en 2018".
En la noche anterior, Marcelo confesó que no podía comer ni podía dormir ante una cita tan importantísima como aquella. "Cuando tienes la oportunidad de hacer historia, sientes esa carga. Pero por alguna razón la estaba sintiendo de verdad. Nunca antes me había pasado una cosa así. Pensé en llamar al médico, pero me preocupaba que no me dejara jugar", continuó.
El lateral tenía que parar a un jugador como Salah y la presión era altísima, sobre todo porque la prensa ya llevaba días haciendo comparaciones. Al final, el egipcio no pudo seguir tras el polémico choque con Ramos.
Por su parte, Marcelo acabó jugando los 90 minutos y le dio la asistencia a Bale para el tanto que volvió a poner por delante al Real Madrid: "Cuando pisé el césped todavía tenía problemas para respirar y pensé: 'si tengo que morir aquí esta noche, joder, moriré".
El Madrid acabó haciendo historia en una noche mágica y nefasta para el Liverpool, sobre todo para Karius. "Nos alineamos bajo todas las luces, vi el balón de fútbol en el círculo central y todo cambio. El paso se quitó de mi pecho y estaba en paz", concluyó Marcelo.
En cuanto a las palabras que dijo Valdano sobre que Marcelo se debía comprar una foto de Salah, el lateral le contestó: "Después de 12 años y tres Champions ganadas, me faltó al respetó así y en directo".