Pocos podrían imaginarse la victoria de River en el José Amalfitani tras la primera hora de encuentro. Con el inicio del choque, Vélez se mostró mejor colocado en el campo y muy eléctrico, buscando la forma de sacar rédito de ataques relámpago.
De esta forma llegaron las primeras oportunidades con un Salinas muy móvil por toda la zona del ataque local. Sin embargo, lo que parecía una dinámica de dominio psicológico sobre el césped -los de Heinze mostraban mayor peligro- se disipó con el lanzamiento del penalti.
En el minuto 26' de encuentro, el colegiado decretó la pena máxima a una entrada inocente de Pinola y fue el propio Salinas el encargado de lanzarlo. Pero se topó con Armani, que completó un partido brillante.
El 'Fortín' erró la ocasión más clara del partido y, mientras se lamentaba, River crecía paulatinamente en el encuentro. Tras terminar la primera mitad en pleno 'correcalles', el 'Millonario' cambio de cara en los segundos 45 minutos.
Y la suerte le sonrió. En un inicio frustrado de Vélez desde atrás, los de Gallardo robaron la bola y se encaminaron rápidamente sobre el arco de Hoyos. Palacios para De la Cruz, gran pase del charrúa y brillante definición de Santos Borré por encima de Hoyos, picadita.
El 0-1 sentó como una losa en el bando local, que jamás volvió a ser el del inicio del duelo. Quintero, el nuevo '10' del 'Muñeco', entró en lugar de Nacho Fernández y dio alegría al juego visitante. En un visto y no visto, Matías Suárez -que sustituyó a Pratto- se la hizo por fuera a Jiménez y le sacó la falta. Lástima para el 'Fortín': penalti, roja y, a la postre, gol.
0-2 con doblete 'cafetero' en el José Amalfitani y noche de cumbia en el viaje de vuelta a Núñez. Aun así, con uno menos y cuatro minutos para el final, Vélez no se rindió y soñó hasta el final con el empate.
Barreal acortó distancias en el 92', pero se quedó sin tiempo para una nueva ofensiva en un final de infarto. El 'Fortín' mantiene su distancia con los puestos de Libertadores y River sube para adentrarse en la lucha por los puestos altos de la tabla. Con 25 puntos, los de Gallardo se ponen a cinco de su competición fetiche.